Cómo Planchar las Camisas

Cuando toca ir al trabajo o a algún evento elegante es importante tener una presencia impecable, sobre todo si se utilizan camisas de vestir.

Sin embargo, para que se vean de manera adecuada es imprescindible saber plancharlas correctamente, de lo contrario pueden darte un aspecto desaliñado y muy diferente al que pretendes conseguir.

Es por esto que te daremos todos los pasos para obtener un resultado maravilloso y varios tips que facilitarán esta tarea algo tediosa.

Limpiar la plancha

Lo primero que debes hacer es verificar que la base esté limpia para que se deslice de manera correcta sobre la tela y no la manche.

En caso de no ser así, puedes mezclar un poco de agua caliente con detergente líquido, echarlo sobre un paño y frotarlo de manera suave sobre la zona. En el siguiente enlace tienes más información sobre cómo limpiar la plancha.

Las planchas de vapor son las más recomendadas para que las camisas queden perfectas. Si tienes una de éstas, verifica que el depósito de agua esté lleno.

Identificar el tipo de tela

Para graduar correctamente la temperatura, debes verificar primero el tejido de la camisa. Para identificar con más seguridad de qué tipo es, puedes buscarlo en la etiqueta.

Si vas a planchar una de algodón, la temperatura puede estar entre 140ºC y 204ºC. Ahora, si la camisa es de poliéster o seda, deberás graduarla a unos 148ºC.

Si debes planchar varias camisas en un mismo instante, es importante clasificarlas y empezar por las que requieran la temperatura más baja y culminar por las que soportan más calor.

Planchar solapas y espalda

Utiliza una tabla de planchar porque su forma ergonómica te ayudará a llegar a los espacios más complicados de manera fácil y conseguirás resultados magníficos. Ajústala para que quede a la altura de tu cintura y evites daños en tu espalda. También puedes optar por una plancha vertical con tabla de planchar incorporada, para dar un punto a favor de tu comodidad, como es el caso de la Rowenta Ixeo QR1020D1.

• Las de manga larga tienen ocho áreas. Inicia por las solapas, izquierda o derecha. Con tus manos limpia la zona que veas más arrugada y desliza la plancha con movimientos suaves ejerciendo un poco de presión sin hacer movimientos bruscos.
• Si tiene depósito de agua esparce un poco de vapor sobre la tela antes de desplazarla.
• Sube hasta la zona de la sisa, donde se une la manga con la camisa, y plancha alrededor de la costura dándole su característica forma curvada, trata de evitar que quede algún tipo de arruga porque se nota al momento de colocársela, sobretodo si es de hombre porque es más ancha en esa zona.
• Desplaza la camisa hasta la espalda y limpia con las manos las arrugas. Aplica el mismo procedimiento sobre la sisa para dejarla perfecta. Luego ve a la zona de la pinza de la espalda, una de las más importantes. Dobla el pliegue y plancha por encima, luego vuélvelo a abrir y pasa nuevamente sobre esta parte para que no quede marcado de manera pronunciada.
• Plancha la parte central de la espalda dejándola completamente limpia, esta es la parte más sencilla. Puedes ayudarte con tus manos para que el proceso sea más rápido. Luego repite el proceso con la pinza del otro extremo y la solapa faltante.
• Debes tener cuidado con la solapa que tenga los botones porque pueden ser propensos a derretirse. Pasa suavemente la punta entre el espacio de cada botón y si lo deseas puedes ayudarte con una cuchara para protegerlos.

Planchar los hombros, mangas y puños

Otra zona también muy importante es la de los hombros, sobre todo si es una camisa que se arruga mucho.

• Adáptala a la forma de la tabla o mesa y con tus manos limpia completamente la zona. Plancha muy bien la sisa para que no aparezcan arrugas y estira la parte que no estás planchando hacia abajo para que no se resbale.
• El punto más difícil es el de los brazos. Comenzamos con la maga preparando la sardineta y los pliegues puño, automáticamente comienza con la plancha para que estos queden perfectos y la sardineta también. Por lo general los puños vienen reforzados con entretela, así que mientras más presión ejerzas mejor será el resultado. Voltea el puño y plancha nuevamente, una vez que hayas terminado podrás notar una línea que puedes planchar nuevamente para que no se vea tan pronunciado.
• Aprovecha la costura de la maga y para realizar un doblez correcto, introduce tu mano y con la palma limpia las arrugas de adentro hacia afuera. Comienza planchando de abajo hacia arriba al ras de la costura y sigue hacia el resto de la zona de la manga. La marca que se produjo después de haber planchado la manga se debe eliminar por no ser estético, así que pasa otra tu mano de adentro hacia afuera para eliminar las arrugas y plánchala.

Planchar el cuello

Una mala práctica es planchar los cuellos de las camisas mientras están doblados. El resultado de esto es una tela ondulada que se ve muy mal.

Lo que debes hacer para evitarlo es extenderlo completamente y pasar la plancha en la superficie por ambos lados. De esta manera va a quedar completamente limpio y perfecto.